Sucesos raros. Coincidencias extrañas. Concatenaciones de circunstancias inverosímiles con no menos inverosímiles resultados. Todo por culpa del azar. Mala suerte. Buena suerte. ¿Es siempre así? A veces nuestra lógica nos dice que hay cosas que no pueden ser azarosas e intentamos buscar una respuesta que vaya más allá. Es improbable que encontremos esa respuesta, pero no hay duda que en ocasiones vivimos acontecimientos que nos resistimos a pensar que son completamente culpa del azar y no podemos evitar preguntarnos si serán un designio o una señal acerca de nuestro destino. Puede parecer absurdo, pero a veces ver las cosas desde ese prisma te permite soñar un poco, y eso está bien. Hace poco un tipo llamó a la radio para contar que sabía el número del gordo de navidad; otro tipo que vendía cupones le dijo que le iba a tocar el gordo a él. Por supuesto no hizo ni caso, pero esa misma noche soñó con un número y acabó comprando un décimo con ese número. Chorradas ¿verdad? Seguramente si, pero si le toca...vaya casualidad ¿no?
martes, 11 de diciembre de 2007
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1 comentario:
Si la vida esta llena de casualidades , a veces un tanto odiosas como por ejemplo que el jefe coga la mania de mandarte a repartir a Lago Bañolas 3 fines de semana seguidos no??
Lo cierto es que esas casualidades yo las llamaria hijoputeces...pero si, tienes razon a veces todo tiene una cierta pinta de casualidad :)
Independencia? Ja' , me rio yo de ti xP.
:**
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